Entre semana, de lunes a viernes, nos levantamos pronto para ir a trabajar y nos quedamos despiertos hasta tarde para disfrutar de compromisos sociales, o para ver esa serie que tanto nos gusta. Al final de la semana, todo lo que queremos hacer es dormir. La reacciónn usual es intentar compensar el cansancio durmiendo algunas horas más el sábado por la mañana y yéndonos a dormir temprano el domingo. Y es que no hay nada de malo en recuperar el sueño los fines de semana, ¿verdad?
Para regular nuestro horario de sueño con éxito, debemos comprender dos conceptos importantes sobre él: el reloj circadiano y el impulso del sueño.
El reloj circadiano
Tu reloj circadiano es el reloj biológico encargado de regular el tiempo de somnolencia a lo largo del día. El impulso de sueño más fuerte (necesidad de dormir) para adultos generalmente ocurre entre las 2 a.m. y las 4 a.m. y durante la 1 p.m. y las 3 p.m. La sensación que experimentamos durante estos momentos la sentiremos menos intensa cuando hayamos dormido lo suficiente y más intensa cuando tengamos sueño.
Tan fácil como el sábado o domingo por la mañana…
Después de una semana de madrugones, nuestra reacción natural es desear dormir más los fines de semana. Irnos tarde a la cama interrumpe el equilibrio entre nuestro impulso de sueño y el reloj circadiano, lo que puede provocar un sueño interrumpido causando irritabilidad, aturdimiento y, lo que es peor, una posible depresión.
Si, además, nuestra agenda social está llena los fines de semana, no habrá forma de estar preparados para la semana que viene. Acostarnos pronto el domingo tiene sentido ¿verdad?, pues desafortunadamente, no funciona.
¡Siestas, siestas y más siestas!
¿Caminamos como zombies? ¡La solución es recargar pilas con una siesta!
Durante la semana laboral, la siesta puede parecer un regalo inalcanzable. Pero si podemos colar una siesta de vez en cuando, es una excelente manera de reponer nuestra energía. Los fines de semana, tratemos de eliminar el concepto de “dormir tarde”, despertémonos a nuestra hora normal y reemplacemos ese tiempo con una siesta. Como con todas las cosas del sueño, el equilibrio es esencial.
Aprender a equilibrar el trabajo, la vida y el sueño
¿Se te hace difícil equilibrar el sueño durante la semana y los fines de semana? Probar estos consejos te ayudará a disfrutar de la vida, hacer bien tu trabajo y optimizar el sueño. No pierdes nada 😉
- Ingerir alimentos ricos en antioxidantes y proteínas, pero bajos en azúcares procesados, grasas y carbohidratos aumenta nuestra energía y mantiene a raya la lentitud.
- Hacer ejercicio para mantenernos activos: Los entrenamientos regulares pueden darnos más energía durante todo el día y regular los gastos de reserva de energía de nuestro cuerpo.
- Limitar el trabajo en casa: Nuestro cerebro necesita un descanso del estrés. Para ayudar a relajarlo y prepararlo para dormir, intentemos limitar la cantidad de trabajo que nos llevamos a casa.
- Destinar noches de citas o noches sociales. Aunque el trabajo es importante y el sueño es necesario, tratemos de hacer que la diversión también sea una prioridad.
- Apagar las distracciones: Cuanto más tiempo involucremos a nuestro cerebro en el trabajo, con actividades como emails e Internet, más tiempo nos costará relajarnos. Al apagar el móvil una hora y treinta minutos antes de acostarnos, permitimos que nuestro cuerpo y cerebro se desaceleren naturalmente por la noche mientras se preparan para dormir.
Grupo Todoplano te anima a poner en práctica esta lista de consejos para dormir de una manera relajada.
¿Y tú? ¿Cuáles son tus tips para relajarte?
Somos líderes en descanso porque sabemos que el corazón de nuestras tiendas, es la calidad del sueño de todos nuestros clientes.