Bienestar

¿Es buena idea dormir con tu bebé en la misma cama?

El sueño del bebé es uno de los mayores retos a los que se enfrentan los nuevos padres. Después de noches de despertares constantes y múltiples intentos por calmar al pequeño, surge la pregunta: ¿es mejor dormir con el bebé en la misma cama o en su propio espacio?

Este debate ha generado opiniones divididas entre pediatras, expertos en sueño infantil y familias que buscan lo mejor para su bebé. Mientras algunos defienden que dormir juntos fortalece el vínculo y facilita la lactancia, otros advierten sobre los riesgos que esto puede implicar.

En Grupo Todoplano, especialistas en descanso desde hace muchos años, sabemos que un sueño de calidad es clave tanto para los padres como para los bebés. Por eso, hoy analizamos las ventajas, riesgos y recomendaciones sobre dormir con el bebé en la misma cama.

 

Colecho: ¿Qué es y por qué algunos padres lo eligen?

El colecho es la práctica de dormir con el bebé en la misma cama o muy cerca de los padres. Se ha practicado en muchas culturas a lo largo de la historia y sigue siendo una elección común en muchas familias.
Uno de los motivos principales por los que los padres eligen el colecho es la comodidad. Para quienes amamantan, tener al bebé cerca facilita las tomas nocturnas sin necesidad de levantarse de la cama. Además, muchos padres sienten que esta cercanía ayuda a calmar al bebé más rápido y a fortalecer el vínculo emocional.
El contacto físico continuo también puede ayudar a regular la temperatura del bebé y mejorar su sensación de seguridad. Para algunos niños, el colecho reduce los despertares nocturnos y les proporciona un sueño más tranquilo.
Sin embargo, a pesar de estos beneficios, los especialistas en sueño infantil y pediatría advierten sobre los riesgos que pueden estar asociados con esta práctica.

¿Cuáles son los riesgos de dormir con el bebé en la misma cama?

Uno de los principales problemas del colecho en la misma cama es el riesgo de asfixia o aplastamiento. Los bebés, especialmente los recién nacidos, aún no tienen el control muscular suficiente para moverse si algo bloquea su respiración. Si un adulto cambia de posición involuntariamente durante la noche o si las sábanas cubren la cara del bebé, puede haber un riesgo serio.

Además, dormir en una superficie demasiado blanda, como colchones muy mullidos o sofás, aumenta el peligro de que el bebé quede atrapado en una posición peligrosa. Por otro lado, existe la posibilidad de que el bebé se deslice entre el colchón y la pared o que quede atrapado en los bordes de la cama sin poder moverse.

Los expertos también mencionan que el sueño de los padres puede verse afectado por la preocupación constante de moverse y lastimar al bebé. Un descanso de mala calidad puede generar agotamiento, algo que impacta directamente en la capacidad de cuidar al niño durante el día.

¿Cómo practicar el colecho de manera segura?

Para las familias que desean compartir el espacio de descanso con su bebé, existen maneras más seguras de hacerlo sin que el pequeño duerma en la misma cama.
El colecho seguro consiste en colocar una cuna o moisés junto a la cama de los padres, de manera que el bebé esté cerca, pero en su propio espacio. Existen cunas diseñadas para ajustarse al lateral de la cama, lo que permite tener al bebé a mano sin comprometer su seguridad.

Si decides dormir con el bebé en la cama, hay algunas precauciones fundamentales:

-Evitar el uso de almohadas, sábanas pesadas y colchones blandos. Lo ideal es que el bebé duerma en una superficie firme y sin obstáculos alrededor.
-No compartir la cama si alguno de los padres ha consumido alcohol, tabaco o medicamentos sedantes. Esto reduce el nivel de alerta y aumenta el riesgo de accidentes.
-Asegurar que la cama no tenga espacios donde el bebé pueda quedar atrapado. Evitar colchones demasiado grandes con bordes donde el bebé pueda rodar y quedar atrapado.
-Dormir en una posición segura. La mejor opción es que el bebé duerma boca arriba, sin estar demasiado cerca de los padres.

Dormir juntos vs. dormir separados: ¿Cuál es la mejor opción?

La decisión de practicar o no el colecho depende de cada familia y de las necesidades individuales del bebé. Para algunos, dormir juntos puede ser la solución para noches más tranquilas y para fomentar la cercanía. Para otros, mantener al bebé en su propio espacio puede significar un descanso más seguro y sin preocupaciones.
Lo más importante es asegurarse de que el bebé duerma en un entorno adecuado y seguro. A medida que crecen, muchos bebés logran acostumbrarse a dormir en su cuna y pueden aprender a conciliar el sueño sin necesidad de contacto constante.
Cada familia debe evaluar su estilo de vida, las recomendaciones médicas y las opciones disponibles para encontrar la mejor manera de garantizar un descanso reparador para todos.

Conclusión: Un descanso seguro es la prioridad

en encontrar el equilibrio entre comodidad y seguridad. Lo más importante es seguir recomendaciones que minimicen los riesgos y permitan que tanto los padres como el bebé tengan un descanso de calidad.

En Grupo Todoplano, entendemos la importancia del sueño para toda la familia. Por eso, ofrecemos colchones, almohadas y soluciones de descanso diseñadas para adaptarse a las necesidades de cada hogar. Si estás buscando mejorar tu descanso mientras cuidas del bienestar de tu bebé, podemos ayudarte a encontrar la mejor opción.