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Cómo lavar una funda de almohada amarilla

Es normal que con el tiempo se forme una mancha en tus fundas de almohada.

A todos nos ha pasado, ir a cambiar las sábanas y encontrarnos que nuestras fundas de almohada tienen una mancha amarilla. Tranquilo, es normal que pase esto después de épocas de mucho calor y en Grupo Todoplano tenemos la solución. Sigue leyendo y descubre cómo lavar una funda de almohada amarilla.

Con el tiempo, aunque usemos fundas, el tejido absorbe la humedad provocada por el sudor y la grasa de la piel. Aunque no nos demos cuenta, sudamos mientras dormimos, ya que es la manera que tiene el cuerpo de regular su temperatura. Por eso, es importante mantener una correcta higiene desde el primer día y lavarlas y renovarlas cuando no se puedan reutilizar más.

¿Cada cuándo lavar las sábanas?

Con la correcta higiene de los textiles y de las fundas de almohada, evitaremos la aparición de ácaros y bacterias. La frecuencia de lavado recomendada es de hasta cada dos semanas durante el invierno, y cada semana en verano, ya que el cuerpo aumenta su sudoración con la subida de temperaturas. Otro factor a tener en cuenta es si somos más o menos sudorosos, en cuyo caso se puede aplicar el lavar tus textiles una vez a la semana todo el año.

La frecuencia de lavado de sábanas recomendada es de hasta cada dos semanas durante el invierno, y cada semana en verano.
Lavar tus textiles con frecuencia es la mejor prevención.

Cómo quitar las manchas amarillas

Sabemos que con el simple lavado puede que la mancha no desaparezca, aunque esté limpia y podamos usarla. Quitar la mancha y conseguir que vuelva a su color original no aportará una mayor sensación de higiene y dormiremos más plácidamente.

Hay varias maneras de quitar las manchas, y para elegir la adecuada para nuestro producto debemos fijarnos si la etiqueta tiene alguna indicación que nos impida usar un determinado producto.

1. Vinagre y bicarbonato

Con esta solución tan elemental, podrás eliminar la mancha manteniendo todas las propiedades del producto, ya que la composición del textil no se altera. Pon agua tibia en un barreño y añade dos tazas de vinagre blanco, dejándolo en remojo hasta 1 hora.

Si la mancha persiste, usa bicarbonato de sodio y vinagre blanco específico de limpieza aplicado directamente sobre la funda, aclarando la mezcla después de media hora.

Las soluciones con productos libres de químicos nocivos son la mejor técnica.

2. Agua caliente y limón

Es uno de los métodos más fáciles y sencillos, ya que no precisa de productos específicos que solo se encuentren en establecimientos determinados. Lo primero es calentar agua en un recipiente donde puedan caber los textiles afectados: un bol en el microondas o una olla servirán.

Mientras hierve el agua, exprime un poco de limón y retira la mezcla del fuego. Introduce en ella los textiles, que queden cubiertos del todo por el agua. Después de 3 horas ya puedes retirarlos y meterlos a la lavadora con tu colada habitual.

3. Lejía

Antes de aplicar lejía a tus textiles, asegúrate en la etiqueta del producto que no dañará su composición, ya que no todos admiten el lavado con lejía (por ejemplo, las fibras naturales 100% o los tratamientos hipoalergénicos). Por eso, puedes usar este método de blanqueamiento como última opción, si las otras no te funcionan.

Ahora ya sabes cómo lavar una funda de almohada amarilla, pero recuerda que la calidad de los textiles también influye en la facilidad que tendrán para volverse amarillos. Por eso, para retrasar este proceso de envejecimiento, es importante invertir en textiles de calidad, que nos durarán más. Echa un ojo a nuestra gama de textiles y equipa tu cama con los mejores productos.

En Grupo Todoplano te desvelamos los trucos para el mantenimiento de tus productos de descanso.

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